Liga Escolar. No dejéis que otros os lo cuenten.


Tras los All Star del sábado, el fin de semana deparó en la jornada del domingo el plato fuerte del hockey madrileño con el torneo triangular en línea de los Zetas en la pista de los Fénix.

Mujeres y hombres pertrechados en sus uniformes dándolo todo para ofrecer uno de los episodios más épicos que se recuerdan desde los enfrentamientos olímpicos en hielo entre rusos y americanos en la época de la guerra fría.

Rojos, negros y blancos, tres equipos, tres estrategias enfrentadas y un solo equipo ganador.  Tod@s contra tod@s. Tres partidos de 25 minutos, sin apenas descanso, con un juego cargado de intensidad y sobre todo emoción, mucha emoción.

Equipo Rojo (6): Aníbal, Arturo, Antonio, David, Olga y Patricia
Equipo Negro (7): Esmeralda, Celia,Raquel, Leire, Patricia,Mónica  y Lucia
Equipo Blanco (5): Yolanda, Rafael, Ricardo, Michiel y Pape Lera.
Porteros:  Jose - con Negros (2) y blancos (1- ) y Fer ( con Rojos (2) y negros (1)

Las caras debutantes se mezclaban con las de veteranos en los tres equipos. El aire se tensaba mientras estos walkirios y walkirias sobre ruedas se ajustaban sus equipos y abrochaban sus patines intercambiando miradas desafiantes.

El público contemplaba expectante el calentamiento, el seguro rodar de sus guerreros, que en ocasiones ofrecían piruetas sorpresivas dignas del mismísimo Javier Fernández.

En los banquillos Begoña y Alex ultimaban sus estrategias, y alentaban con arengas comedidas pero eficaces a l@s componentes de los 3 equipos aportando una motivación extra que dio lugar a lo que después se vería en la pista.  

Rojos contra Negros (2-2)

Partido de ensueño, de poder a poder, de tú a tú. Defensas ordenadas, ataques veloces, caídas fruto del ímpetu, disputas en las vallas, paradas encomiables, ansiedad en los banquillos, más caídas, más valla, más caídas. Goles de magnífica factura: primero el uno, luego el otro, un equipo se adelanta, el otro vuelve a igualar…. Sólo el pitido final consiguió calmar aquel delirio sobre ruedas. A destacar el gol de la sonriente Olga de una sutileza impecable. 

Blancos contra Negros (5-0)

El equipo blanco, a pesar de disponer de menos recambios, supo aprovechar en los primeros momentos, el titánico esfuerzo del equipo negro en el partido anterior y adelantarse en el marcador en los primeros minutos generando incertidumbre entre sus huestes,  lo que dio lugar a continuas llegadas en oleadas del equipo blanco que terminaron hasta en 5 ocasiones con el puck entre las redes  a pesar de los esfuerzos de Jose el portero y su señora que desde la banda alentaba a su guerrero preferido al tiempo que destinaba miradas retadoras a sus oponentes. Siendo justos, el resultado fue engañoso, porque las walkirias negras merecieron más, compitieron a un gran nivel, llegaron al área en bastantes ocasiones con superioridad y sólo la mala fortuna y la actuación de Fer - Securitas impidieron otro resultado.

Todos los jugadores blancos consiguieron marcar. A destacar el gol a cámara super- lenta del debutante Rafa.

Rojos contra Blancos (1-0) 

Épica en estado puro. Qué partido, hasta el final no se supo que depararía el destino. 
Los blancos tras superar al equipo negro salieron crecidos a la pista donde les esperaban los rojos, más descansados, que habían estado observando todos sus movimientos, pero con el hándicap de no poder contar con una de sus piezas estratégicas, el Doctor Lecter (Aníbal). 

De poder a poder, en una toma y daca muy equilibrado, sin un claro dominador hasta que una jugada en los primeros minutos cambió el ritmo del partido. Arturo “Missión” saliendo desde su campo a una velocidad de vértigo, perseguido de cerca por Ricardo “Corazón de León”, se disponía a superar a Pape Lera que consiguió estirar el stick provocando la parada en seco de Arturo al que embistió con todo y por detrás el valeroso Ricardo con resultado de corte en la parte superior de la nariz provocado por su propio casco. A pesar de la rápida intervención de la Doctora Mahou que aminoró la salida del flujo sanguíneo con unas tiras de aproximación, el inagotable guerrero no pudo continuar muy a su pesar.

 El equipo blanco sin refuerzos y sin su líder bajó un poco los brazos y tuvo que echarse atrás aguantando envite tras envite hasta que, a poco tiempo del final, encajó el único gol del partido en una contra de manual en la que Jose, exhausto por tanta parada, no pudo hacer nada. 
Al final todo fue cordialidad, abrazos, besos y lágrimas por doquier. Un par de horas intensas con final feliz que arrojaron este resultado. 

Campeón: Equipo Rojo y Begoña (3-0) 

El próximo domingo más. No os lo perdáis. Anulad vuestras citas, recurrir a salus, baby-sisters , papa-sister o lo que sea menester, pero no faltéis. Vividlo en primera persona.

 No dejéis que otros os lo cuenten.

Crónica: José Lara

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